POV NORMAL
Al llegar a la habitación se sentó sobre la cama e hice lo mismo que ella.
-Bueno, ¿qué querías?
-Verás... Quería contarte por qué Danny y yo rompimos.
-¡Por fin alguien quiere contarmelo!
-A ver... Tiene que ver contigo.
-¿Conmigo?
-Sí... Pero no te lo tomes a mal.
-Es que no sé...
-Tú déjame contartelo y luego ya me dices ¿vale? -Asentí- Verás, cuando volviste, Danny me contó todo lo que pasó en Bolton y la verdad, lo ví muy feliz y eso me alegró bastante. Pero, después de la cena, no sé lo que le pasó que lo encontré muy distante. Quedabamos, pero no era como si no estuviera conmigo, se quedaba mucho rato pensando... Y después de eso habló conmigo, me dijo lo que pasaba. Discutimos y bueno... Ya sabes como terminamos, pero no te guardo ningún rencor, es más, me caes genial y es normal, el primer amor nunca se olvida.
-Me odias...
-No! No te odio, al contrario.
-¿No te das cuenta? Habéis roto por mi culpa, soy como... Como una zorra.
-No lo eres.
-¿Y ahora que hago?
-Habla con él, hay cosas que no te he contado. Es más adecuado que te lo diga él. Mira yo me voy ya, así tenéis más rato para hablar.
Se levantó y salió de la habitación. Yo la seguí y la acompañé hasta la puerta de la casa. Se despidió de mí con un abrazo y se fue. Nada más cerré la puerta de la calle crucé el salón mientras Tom, Dougie y Harry me miraban.
-¿Y Danny?
-En la cocina.
Nada más escuchar a Harry decir donde estaba Danny me dirigí hasta allí. Y Harry no se equivocaba. Sin pensarlo dos veces lo empujé y empecé a darle golpes en el pecho.
-¿Por qué no me dijiste que Georgia y tú rompistéis por mi?!
-Primero déjame explicarlo.
-Habla.
-No es muy fácil de explicar...
-¡Me da igual! Habla.
-A ver, cuando tu padre te llevó a aquel internado, recuerdas que te quería verdad? -asentí- Y cuando te fuiste, al cabo de un tiempo, pensé que ya te había olvidado, y no. Volviste. Te ví en el Starbucks y todo gracias Tom, si él no nos hubiera obligado a ir allí no te habría visto de nuevo. ¿Y qué pasó? Que cuando te volví a ver... Pasó algo como... Me di cuenta de que aún te quería y lo sigo haciendo. Pero estabas con Josh, lo que quería decir que te habías olvidado de mí. Y... Joder, cuando te vi con él sentía celos. Porque si tu padre no hubiera entrado en la habitación cuando estabamos tú y yo juntos, nada de esto hubiera pasado. Y ahora, no estarías pasándolo mal por su culpa. ¿Y que hago yo mientras? Aguantarme. __(tn), que no soporto que lo pases mal.
-¿Por qué me lo dices ahora? Podrías habermelo dicho antes y haberte ahorrado que Georgia viniera...
-Tenía miedo de decírtelo, estabas con Josh y... No sabía si era adecuado decírtelo o no. No quería que lo pasaras mal. Además, tengo que admitir que no quería que me partiera la cara.
-No dejaría que lo hiciera.
-Pues bien merecido me lo tendría.
-No...
Se acerca lentamente hacia mí. Me mira a los ojos y rodea mi cintura con uno de sus brazos. Sube su otro brazo y con su mano acaricia mi mejilla y coloca mi pelo detrás de mi oreja. Yo cerré los ojos. Me gustaba sentir la mano de Danny acariciar mi mejilla una y otra vez. Tenía los brazos caídos a ambos lados de mi cuerpo atenta a cada movimiento que hacía Danny. Cuando sentí como su mano bajaba hasta ponerla en mi espalda abrí los ojos. Sus ojos azules toparon con los míos. Estaba cerca. Muy cerca.
Tenía la mente en blanco. El hecho de tener a Danny tan cerca me ponía nerviosa. No sabía que hacer, se supone que sabía lo que iba a hacer. Cada vez más cerca, su nariz rozó la punta de la mía, cosa que me hizo arrugarla.
-Tú fuiste la primera que quise, tú fuiste el primer amor que tuve, ¿y aun así crees que no te quiero?
Decidí moverme, rodeé su cuello con mis manos y sonreí. Él también, pero luego esa sonrísa se hizo más grande y me mostró sus dientes.
Y en apenas un segundo, Danny me besó.
Supongo que cualquier fan de McFly moriría por un beso de Danny o de Dougie o de Harry o de Tom... Pero en ese momento yo no sabía qué hacer. Él estaba ahí, intentando conseguir alguna respuesta a ese beso mientras yo estaba quieta, con mis manos en su cuello, con los ojos entre abiertos y observando como los suyos estaban cerrados.
Creo que empezó a darse por vencido ya que la presión de sus labios sobre los mios disminuía poco a poco. Pero no dejé que lo hiciera más. Puse mis manos a ambos lados de su cara, acariciando sus mejillas y respondiendo a ese beso.
Nada más mover mis labios él me estrujó más a su cuerpo. Cerré los ojos inconscientemente mientras nuestros labios jugaban. Era un beso suave, lento, amoroso.
En aquel momento, solo estabamos él y yo, el resto desapareció de repente. Su mano subía y bajaba por mi espalda, repitiendo el mismo recorrido una y otra vez mientras yo acariciaba su cuello.
No quería que ese beso acabara, pero lo hizo.
Yo le miraba con los ojos abiertos como platos, pero él solo me abrazó. Escondí mi nariz en su cuello mientras el me susurraba algo al oído.
-No te alejes de mí, solo quédate conmigo.
Lo apreté más a mí y deposité un beso en su cuello.
-Voy a cambiarme ¿vale?
Él asintió, pero antes de que saliera de la cocina me cogió del brazo y me dio otro beso.
Salí de la cocina, pasé por el salón y en ese momento, todos me miraban.
-¡No lleva rastros de sangre! ¡No lo ha matado!
-¿Qué? ¿Matarlo? ¿Por qué? -Pregunté confusa.
-¿Alguien me cuenta que ha pasado ahí dentro?
-Que te lo cuente él, yo voy a cambiarme.
Subía las escaleras rápido y me encerré en la habitación. Me quedé apoyada en la puerta, me mordí el labio y sonreí. ¿Enserio me ha besado?
Es cortito y esas cosas pero bueno, ¿algo es algo no? He estado bastante tiempo para escribir este cooooooooooooooooooorto capítulo, pero prometo que el próximo será más largo. O eso supongo. Gracias por leer, comentar, votar y esas cosas chachis que hacéis.
Un besiiiiiii!